¿Sueñas?
Una vez me dijiste, ''¿qué sueñas?'', recuerdo que esa vez te contesté, ''quiero ser profesora de inglés''.
Tu sonrisa fue lo más bonito que iluminó tu cara es ese momento, me contaste sobre tu pequeña batalla contigo mismo cuando vivías en Alemania.
Años después volviste a preguntar ''¿qué sueñas?'' y contesté ''Quiero ser médico''.
Sonreíste y repartiste la cartas. Un full de ases hizo que te ganara. ''Podrás conseguir todo lo que te propongas'' dijiste.
Pasaron dos meses tan solo, recuerdo que acababa de llegar de clase, estaba cansada, acababa de tener un examen complicado, me miraste, acariciaste mi cara tras mi beso en tu mejilla y dijiste ''¿qué sueñas?''
''Quiero ser psicóloga''.
''¿Por qué ese cambio?'' Preguntaste extrañado.
''Porque no quiero que los demás pasen por la misma mierda que estoy pasando yo, es demasiado dífícil, triste y cruel.''
''Nadie dijo que la vida fuese fácil, pero siempre te he preguntado ¿qué sueñas? Sin embargo me contestas a una pregunta que nunca te he hecho que es ¿qué quieres ser? Nunca has respondido a mi pregunta de ¿qué sueñas?''
''¿Qué sueño? Pues..., viajar, comprarme un coche, poder hablar otros idiomas, no sé.''
''Eso es muy modesto cariño.''
''Lo sé, pero nunca he querido grandes cosas, no quiero ser cantante, ni modelo, ni artista.''
''Pues yo sé que tienes un talento para algo, pero tendrás que averigüarlo tu''. Sonreíste y dejaste que acabase mi tarea y estudiara.
Al poco tiempo enfermaste y tu pregunta sobre mis sueños no existía.
Casi dos años después, te pregunté ''¿cuál es tu sueño?''
''Reunir a mi familia un día, pero sobre todo que tú consigas lo que sueñas''. Sonreímos los dos juntos, y te abracé.
A los pocos meses conseguiste una reunión con toda la familia. Mas de 300 personas estaban en la misma casa, solo para cumplir tu deseo, te veías feliz. Te di un beso tras una foto y de nuevo dijiste ''¿qué sueñas?''
''Quiero visitar Alemania, me encantaría poder ver la casa en la que viviste, quiero terminar mis estudios, y quiero que algún día alguien vea lo que todos estos años he escrito''.
''Eso suena muy bien''.
''Pero quiero que estés orgulloso de mi''.
''Yo estoy orgulloso de ti desde el mismo día que conseguiste dar tu primer paso''. Me hiciste llorar, pero yo sabía que era verdad.
Solo unos meses mas tarde, tu enfermedad casi te había consumido, pero seguías sonriendo cuando iba a verte, solo un poco, y solo para mí, pero siempre recordaré eso.
Ese día quitaste tu mascarilla de tu boca y me dijiste ''¿qué sueñas?''
No te contesté, solo sonreí, te di un beso en la frente y te dije que te quería. Mi mente estaba deseando que te pusieras bien. Solo quería que te recuperaras.
A la noche siguiente, tuve una mala sensación y mi padre me despertó para decirme que te habías ido.
Lloré como nunca antes.
Casi igual que lo estoy haciendo ahora. Casi igual que siempre que te recuerdo.
¿Qué sueño? Quizá con que no existan mas enfermedades, con que la sociedad no sea cruel, con poder viajar como quería en ese entonces, pero sobre todo, con ser feliz.
Solo hay una cosa que tengo en claro cada vez que te recuerdo. Siempre te daré las gracias por todo lo que me has enseñado.
Gracias por ayudarme a aprender alemán, por enseñarme a jugar al póker, por ayudarme a superar criticas, por ayudarme a inventar historias, por enseñarme mi pasión por la música, por enseñarme a ser mejor.
Pero hay algo que para mi es aún mas importante, y que ayuda a estar donde estoy.
Gracias por enseñarme a soñar.
Tu sonrisa fue lo más bonito que iluminó tu cara es ese momento, me contaste sobre tu pequeña batalla contigo mismo cuando vivías en Alemania.
Años después volviste a preguntar ''¿qué sueñas?'' y contesté ''Quiero ser médico''.
Sonreíste y repartiste la cartas. Un full de ases hizo que te ganara. ''Podrás conseguir todo lo que te propongas'' dijiste.
Pasaron dos meses tan solo, recuerdo que acababa de llegar de clase, estaba cansada, acababa de tener un examen complicado, me miraste, acariciaste mi cara tras mi beso en tu mejilla y dijiste ''¿qué sueñas?''
''Quiero ser psicóloga''.
''¿Por qué ese cambio?'' Preguntaste extrañado.
''Porque no quiero que los demás pasen por la misma mierda que estoy pasando yo, es demasiado dífícil, triste y cruel.''
''Nadie dijo que la vida fuese fácil, pero siempre te he preguntado ¿qué sueñas? Sin embargo me contestas a una pregunta que nunca te he hecho que es ¿qué quieres ser? Nunca has respondido a mi pregunta de ¿qué sueñas?''
''¿Qué sueño? Pues..., viajar, comprarme un coche, poder hablar otros idiomas, no sé.''
''Eso es muy modesto cariño.''
''Lo sé, pero nunca he querido grandes cosas, no quiero ser cantante, ni modelo, ni artista.''
''Pues yo sé que tienes un talento para algo, pero tendrás que averigüarlo tu''. Sonreíste y dejaste que acabase mi tarea y estudiara.
Al poco tiempo enfermaste y tu pregunta sobre mis sueños no existía.
Casi dos años después, te pregunté ''¿cuál es tu sueño?''
''Reunir a mi familia un día, pero sobre todo que tú consigas lo que sueñas''. Sonreímos los dos juntos, y te abracé.
A los pocos meses conseguiste una reunión con toda la familia. Mas de 300 personas estaban en la misma casa, solo para cumplir tu deseo, te veías feliz. Te di un beso tras una foto y de nuevo dijiste ''¿qué sueñas?''
''Quiero visitar Alemania, me encantaría poder ver la casa en la que viviste, quiero terminar mis estudios, y quiero que algún día alguien vea lo que todos estos años he escrito''.
''Eso suena muy bien''.
''Pero quiero que estés orgulloso de mi''.
''Yo estoy orgulloso de ti desde el mismo día que conseguiste dar tu primer paso''. Me hiciste llorar, pero yo sabía que era verdad.
Solo unos meses mas tarde, tu enfermedad casi te había consumido, pero seguías sonriendo cuando iba a verte, solo un poco, y solo para mí, pero siempre recordaré eso.
Ese día quitaste tu mascarilla de tu boca y me dijiste ''¿qué sueñas?''
No te contesté, solo sonreí, te di un beso en la frente y te dije que te quería. Mi mente estaba deseando que te pusieras bien. Solo quería que te recuperaras.
A la noche siguiente, tuve una mala sensación y mi padre me despertó para decirme que te habías ido.
Lloré como nunca antes.
Casi igual que lo estoy haciendo ahora. Casi igual que siempre que te recuerdo.
¿Qué sueño? Quizá con que no existan mas enfermedades, con que la sociedad no sea cruel, con poder viajar como quería en ese entonces, pero sobre todo, con ser feliz.
Solo hay una cosa que tengo en claro cada vez que te recuerdo. Siempre te daré las gracias por todo lo que me has enseñado.
Gracias por ayudarme a aprender alemán, por enseñarme a jugar al póker, por ayudarme a superar criticas, por ayudarme a inventar historias, por enseñarme mi pasión por la música, por enseñarme a ser mejor.
Pero hay algo que para mi es aún mas importante, y que ayuda a estar donde estoy.
Gracias por enseñarme a soñar.
Comentarios